Con toda la receptividad que caracteriza al personal de la Coordinación Laboral, el lunes 19 de mayo de 2008, fue recibido en nuestras instalaciones de El Vigía, el primer grupo de funcionarios del Tribunal de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes de la Circunscripción Judicial del Estado Mérida, sede El Vigía; en acatamiento de los lineamientos de la Sala de Casación Social, que precisa la consolidación de la verdadera justicia social, al servicio de los ciudadanos, con apego a la disciplina, control, celeridad, transparencia y buen funcionamiento y básicamente con la formación de un funcionario judicial, comprometido, responsable, respetuoso, humanizado, verdaderos representantes de la justicia con rostro humano; quienes recibieron de nuestro personal designado, en las diferentes unidades, apoyo y colaboración con base en sus conocimientos y experiencia, para su entrenamiento en el contexto del modelo organizacional y de funcionamiento de Circuito, que consolida el proceso de modernización y transformación que ha adelantado fundamentalmente la Sala de Casación Social dentro del Poder Judicial; y del que representan un paradigma nuestro modelo laboral, que ha sido ubicado a la vanguardia de otras instancias.
Esta grata y enriquecedora experiencia, buscará contribuir al éxito de la próxima implementación en su jurisdicción, de la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, un instrumento legal de avanzada, que procura la protección integral, es decir, jurídica y social, del sector infantil y juvenil, y cuya premisa es el principio del Interés Superior del Niño, reconociendo a éstos como personas en desarrollo, con un régimen progresivo de derechos, garantías y responsabilidades inherentes a todos los seres humanos.
Esta grata y enriquecedora experiencia, buscará contribuir al éxito de la próxima implementación en su jurisdicción, de la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, un instrumento legal de avanzada, que procura la protección integral, es decir, jurídica y social, del sector infantil y juvenil, y cuya premisa es el principio del Interés Superior del Niño, reconociendo a éstos como personas en desarrollo, con un régimen progresivo de derechos, garantías y responsabilidades inherentes a todos los seres humanos.